Por David Tomas, publicado el 30 junio 2022
El marketing es lo que hace crecer a una empresa, por lo que es un elemento imprescindible. Además, las estrategias siempre pueden ajustarse a un presupuesto, que puede ser mayor o menor en función del punto en el que se encuentre la marca. Así que cuando se habla de startup, donde el presupuesto es extremadamente ajustado, se puede recurrir al bootstrap marketing.
¿Qué es el bootstrap marketing?
El bootstrap más que una estrategia es una especie de mentalidad en la que uno mismo intenta sacar el máximo número posible de tareas de marketing con el fin de reducir costes, ya que la marca puede estar no generando ingresos todavía. En algunas ocasiones también se cuenta con la ayuda de amigos, conocidos o contactos que sean expertos en el tema o tengan unos conocimientos mínimos para aprender o realizar tareas específicas a cambio de una pequeña cantidad de dinero, un obsequio o intercambio.
Hoy en día es mucho más fácil aplicar el bootstrap marketing, ya que ese puede encontrar información en redes sociales, en blogs y en páginas web en general. Esto permite obtener unos conocimientos mínimos para iniciar una estrategia de marketing básica con la que dar a conocer una marca hasta que esta empiece a generar beneficios.
Por qué el bootstrap marketing puede ayudar a tu startup
Cuando hablamos de una startup nos referimos a esas empresas de nueva creación o que todavía están en su fase inicial y que, pese a tener una grandes posibilidades de crecimiento, aún no generan ingresos suficientes como para poder invertir en estrategias de marketing. Es justamente en este punto donde entra en escena el bootstrap marketing.
A través del boostrap se pueden iniciar pequeñas campañas de marketing que permitan dar a conocer la marca y sus proyectos entre la audiencia o, incluso, para conseguir inversores. Estas campañas pueden estar dirigidas y gestionadas por uno mismo o por amigos, conocidos o contactos que estén dispuestos a colaborar a cambio de nada o a cambio de un precio simbólico. Es justamente la poca inversión económica en estas estrategias lo que pueden ayudar a que la startup crezca.
Estrategias de bootstrap marketing para empresa
Hay varias estrategias de bootstrap para empresas muy fáciles de aplicar. Estas son algunas de ellas:
Crear una lista de correo: es una de las formas más sencillas de estar en contacto con los clientes e informarles de cualquier novedad, promoción, oferta… Se trata de una acción que no implica una gran inversión de tiempo y dinero si se utiliza la herramienta apropiada y que podría ayudar a generar ventas a largo plazo. Eso sí, para que al usuario le resulte atractiva la idea de dejar su correo electrónico se puede ofrecer un material descargable, un descuento o algún servicio exclusivo.
Diferenciarse de la competencia: hacer un estudio sobre lo que está haciendo la competencia e investigar qué piensa el público de ella puede dar pistas sobre cómo mejorarlo y ser diferente dentro de un mismo sector.
Buscar aliados: siempre hay blogs, perfiles en redes sociales, periódicos locales u otros medios dispuestos a hablar de una marca que está empezando. Hay que intentar buscar esos medios para darse a conocer.
Aprovechar al máximo las redes sociales: las redes sociales se han convertido en uno de los canales de comunicación más efectivos, ya que a través de un contenido atractivo y de calidad se puede llegar a un elevado número de usuarios. Puede que el crecimiento sea lento, pero efectivo a largo plazo. En este punto es importante encontrar aquella red social o aquellas redes en las que más representado esté el público objetivo. También se pueden hacer pruebas para ver en qué red social se genera más engagement.
Utilizar chatbots: es un recurso barato y con muy buenos resultados, ya que es un software capaz de simular y procesar la conversación humana, ya sea por escrito u oralmente, gracias a que está dotado de inteligencia artificial. Esto significa que es capaz de resolver dudas, responder preguntas, hacer recomendaciones y, en general, ayudar al cliente en cualquier momento del día y cualquier día de la semana.
Para llevar a cabo cualquiera de estas acciones no se necesita un gran presupuesto, pero sí constancia para que a corto o largo plazo se vean resultados. También es importante conocer el tipo de cliente al que se quiere llegar para que todo aquello que se haga vaya dirigido a ese público objetivo.