El principio de la exclusividad es uno de los trucos más utilizados en marketing. Tenemos miedo a perdernos cosas, y cuanto más raro es algo, más lo deseamos. Por eso, el scarcity marketing es una estrategia casi infalible. ¿Sabes en qué consiste y cómo aplicarlo a tus campañas? ¡Te lo contamos!
El scarcity marketing es una estrategia de marketing que se basa en el principio de que la gente desea las cosas que son difíciles de conseguir. Por tanto, la marca crea una especie de "escasez artificial" para fomentar la demanda de un producto o servicio.
Entre los ejemplos más comunes de scarcity marketing podemos encontrar los eventos solo con invitación o los productos que solo se distribuyen a personas concretas. Por ejemplo, una marca de ropa puede organizar un lanzamiento exclusivo solo para influencers antes de poner el artículo a disposición del público general. O generar un código exclusivo para los seguidores de la marca durante un periodo concreto.
El scarcity marketing también es muy utilizado en el sector de la tecnología. Apple es un gran ejemplo, ya que consigue que la gente haga cola durante toda la noche para ser de los primeros en tener un iPhone último modelo. Los productos de lujo y los coleccionables también son buenos ejemplos de este tipo de estrategias.
Cuentas atrás. Si el usuario sabe que tiene un tiempo limitado para tomar una decisión de compra, será más probable que se anime a actuar. Por ejemplo, puedes poner una cuenta atrás tipo "Esta oferta acaba en 2 horas y 55 minutos".
Productos con existencias limitadas. Desde la Pepsi Crystal hasta el ketchup de Heinz de color morado (sí, en serio), la historia del marketing está llena de ejemplos de productos cuya mayor virtud es ser de edición limitada.
Mostrar el inventario de existencias. Si queda poco stock de un producto, asegúrate de mostrar ese dato en un lugar destacado en la página de compra. El miedo a quedarse sin algo es una de las técnicas de scarcity marketing que nunca fallan.
Ofertas de temporada. Las promociones especiales de Black Friday o las bebidas navideñas del Starbucks son otro ejemplo fantástico de scarcity marketing. Al estar disponibles solo en unas fechas concretas, los usuarios tienen un incentivo extra para comprar.
Mostrar el comportamiento de otros usuarios. La prueba social es un componente muy potente del scarcity marketing. Al mostrar el número de personas que han comprado un producto, transmitimos la idea de que se trata de algo deseable y solicitado, lo que aporta un impulso extra para comprar.
Precios de salida reducidos. Para estimular la demanda de un producto en un lanzamiento, puedes ofrecer las primeras unidades a un precio reducido. De esta manera, los clientes potenciales tienen un motivo extra para animarse a probarlo.
Las ofertas por dispositivo. Por ejemplo, ofrecer un descuento especial o incluso un producto exclusivo para los usuarios de tu app consigue un beneficio doble: incrementas la demanda gracias al scarcity marketing y además incentivas las descargas.