El vídeo commerce ha cambiado totalmente la forma en la que las marcas muestran y venden sus productos online. Esta tendencia se apoya en el poder del video marketing para captar la atención, generar confianza y mejorar la conversión. Pero ¿qué es exactamente el vídeo commerce y cómo funciona?
El vídeo commerce es una técnica de venta online en la que se incluyen vídeos en directo con funcionalidades de compra directa dentro del mismo contenido. Esto significa que, además de conocer el producto, los usuarios pueden comprarlo sin abandonar el vídeo, incluso lanzar preguntas y resolver dudas en tiempo real.
A diferencia del video marketing tradicional, donde el formato vídeo tiene un objetivo puramente promocional, en el video commerce es el canal principal de venta, cubriendo tanto las necesidades informativas y de entretenimiento como de conversión y venta.
El video commerce suele utilizarse en plataformas sociales como TikTok, Instagram Live o Amazon Live, que son los canales que están liderando esta tendencia porque, además de permitir este formato, permiten una interacción bidireccional. Dicho esto, la integración del live shopping en un ecommerce significa incluir enlaces directos a productos, catálogos sincronizados o, incluso, carritos emergentes, que deben permitir la inclusión de artículos sin salir del vídeo. De esta manera, la experiencia del usuario es fluida y sin interrupciones, ya que el consumo de contenido y la conversión ocurren dentro de un mismo entorno y evento. Entre los casos de uso más habituales destacan los lanzamientos de productos, las promociones flash y las sesiones de preguntas y respuestas en directo, donde los usuarios pueden resolver dudas al instante y comprar en directo con una mayor confianza.
Este tipo de vídeo de producto ofrece numerosos beneficios para las marcas y los consumidores, empezando con que genera un mayor engagement y una tasa de conversión más alta. Esto es gracias a que se combina el contenido visual con la interacción directa, manteniendo la atención del usuario más tiempo y facilitando las decisiones de compra.
También cabe destacar que el ecommerce con vídeo humaniza el proceso de compra y refuerza la conexión con la marca, ya que hay una persona real explicando o utilizando el producto, lo que transmite en el usuario una mayor cercanía y autenticidad. A esto se suma la posibilidad de obtener feedback en tiempo real, ya que la marca puede responder dudas al instante y generar un entorno de confianza, que es algo clave para impulsar la acción y fidelizar al cliente.
Varias marcas líderes ya están aprovechando el video commerce para transformar su manera de vender online. Sephora y Douglas son un ejemplo, ya que hacen transmisiones en directo con expertos en cosmética, quienes explican cómo utilizar sus productos, así como también responden preguntas y enlazan directamente a las fichas de compra, generando una experiencia de asesoramiento personalizada.
Nike es otra marca que está utilizando los vídeos en directo para presentar nuevos lanzamientos, hacer testeos y mostrar cómo se usan sus productos en contexto. O Decathlon, que utiliza vídeos explicativos y demostraciones en directo de productos deportivos para explicar los tipos de uso de sus productos y aumentar la confianza del consumidor.
Podemos concluir, entonces, que las ventas con contenido visual en directo son una tendencia en crecimiento, ya que fusiona el contenido visual atractivo con funcionalidades de compra integradas. Pero, además, es una herramienta ideal para diferenciarse de la competencia ofreciendo experiencias más inmersivas y personalizadas, captando la atención del usuario y guiándolo hacia la conversión en tiempo real. Eso sí, su efectividad radica en la combinación del storytelling emocional y la facilidad de compra, por lo que no sirve cualquier vídeo. Justo por este motivo, contar con una agencia de ecommerce o una agencia de video marketing especializada puede ser clave para implementar esta estrategia con éxito y aprovechar todo su potencial comercial.