Saber aprovechar las ventajas de la inteligencia artificial se ha convertido en una habilidad clave. Las nuevas tecnologías basadas en IA no solo están cambiando la forma en que nos comunicamos o generamos contenido, sino también cómo organizamos tareas, optimizamos procesos y tomamos decisiones con mayor agilidad.
En este artículo, exploramos tres de las herramientas de IA más innovadoras y útiles para mejorar la eficiencia en el trabajo: Make, Gemini y Weavy. Cada una de ellas responde a una necesidad concreta en el día a día laboral, desde la automatización de contenidos hasta la mejora en la colaboración de equipos y la organización de la información. Veremos sus funcionalidades principales, cómo se integran en entornos profesionales y qué beneficios aportan para quienes buscan ser más productivos con la ayuda de la tecnología.
Weavy es una plataforma de inteligencia artificial (ahora parte de Figma) diseñada para crear contenido visual y multimedia a partir de instrucciones sencillas. Desde imágenes generadas con IA hasta vídeos breves con animaciones, permite a profesionales del marketing, redes sociales y diseño gráfico producir materiales de alta calidad sin necesidad de recurrir a múltiples herramientas o conocimientos técnicos avanzados.
Su motor generativo combina texto, imágenes y elementos gráficos en tiempo real, lo que agiliza procesos como la creación de piezas para campañas publicitarias o publicaciones sociales. Además, permite transformar ideas en contenidos visuales mediante una interfaz intuitiva, lo que acorta drásticamente los ciclos de producción y revisión.
En el ámbito profesional, Weavy es ideal para equipos de marketing que necesitan generar una gran cantidad de piezas visuales de forma rápida y coherente con la identidad de marca. Su integración con otras plataformas de diseño y automatización facilita su uso dentro de flujos de trabajo más amplios, como la programación de publicaciones o el diseño de presentaciones corporativas.
También resulta útil para creadores de contenido que buscan producir vídeos explicativos o clips para redes sociales con poco esfuerzo. La herramienta permite añadir locuciones automáticas, efectos visuales y ajustar la duración de los clips en función del canal donde se vayan a publicar.
Para un profesional con múltiples responsabilidades, Weavy actúa como un asistente creativo que reduce la carga operativa y permite enfocarse en las tareas de mayor valor. Al minimizar el tiempo dedicado a la edición manual y ofrecer resultados de calidad con pocos clics, contribuye a una mejor gestión del tiempo, mayor agilidad en las entregas y una mejora sustancial en la calidad del output visual.
Gemini es la suite de herramientas con inteligencia artificial integrada directamente en Google Workspace. Funciona como un copiloto dentro de aplicaciones como Docs, Slides, Gmail o Drive, ayudando a redactar, resumir, organizar ideas y proponer contenidos de forma autónoma. A diferencia de otras herramientas externas, su integración es nativa y se adapta al contexto del archivo en uso, lo que permite una experiencia fluida y productiva desde el entorno de trabajo habitual.
Entre sus casos de uso más habituales se encuentra la creación de presentaciones completas en Slides a partir de simples instrucciones, el resumen de documentos largos en Docs o la organización automática de archivos en Drive según temas. Gemini también puede generar imágenes e ilustraciones para acompañar informes o diapositivas, facilitando así la creación de materiales más atractivos sin salir del ecosistema de Google.
Su capacidad para entender el contexto y ofrecer contenido adaptado lo convierte en un apoyo estratégico para profesionales que deben generar documentación extensa o colaborar con varios equipos.
El impacto de Gemini en la productividad es evidente. Disminuye el tiempo necesario para redactar, revisar y presentar información, lo que se traduce en ciclos de trabajo más ágiles. Además, al permitir una colaboración más inteligente entre miembros del equipo (con sugerencias y redacciones compartidas en tiempo real), se reduce la carga operativa y se incrementa la eficiencia general en la producción de contenidos y comunicación interna.
Make es una herramienta pensada para desarrolladores y empresas que buscan incorporar funcionalidades de colaboración directamente en sus propias aplicaciones. Su propuesta se basa en ofrecer APIs y SDKs que permiten añadir chats, feeds de actividad, manejo de documentos y otros elementos colaborativos en plataformas personalizadas sin tener que desarrollarlos desde cero.
Esta herramienta está orientada principalmente a startups tecnológicas, equipos de desarrollo y empresas con productos digitales que necesitan enriquecer su propuesta de valor con funciones sociales e interactivas. En lugar de utilizar soluciones externas, Make ofrece una experiencia de usuario nativa dentro de los propios entornos digitales de la empresa.
Al integrar Make, las empresas ahorran recursos de desarrollo al no tener que construir desde cero funcionalidades complejas. Esto se traduce en menos tiempo invertido por parte de los equipos técnicos y una mayor rapidez para lanzar productos con capacidades colaborativas. La interfaz es moderna y modular, y se adapta fácilmente a distintos lenguajes y frameworks.
Además, al mantener a los usuarios dentro de una misma plataforma, se mejora la experiencia y se incrementa la retención. La posibilidad de colaborar en tiempo real y acceder a recursos compartidos sin salir de la aplicación central reduce fricciones y acelera la toma de decisiones.
La versatilidad de Make lo convierte en una solución potente para mejorar la interacción y colaboración en cualquier aplicación orientada a usuarios activos o con funciones de trabajo compartido.
La implementación de herramientas de IA para mejorar la productividad en el entorno laboral no solo es una tendencia, sino una necesidad estratégica para empresas que buscan ser más ágiles, competitivas y eficientes. Soluciones como Make, Gemini y Weavy demuestran que la IA no solo mejora la productividad, sino que también permite liberar tiempo para tareas de mayor valor añadido.
Incorporar estas herramientas con criterio, objetivos definidos y una cultura de adopción tecnológica puede marcar la diferencia en la manera en que los equipos trabajan, colaboran y logran sus objetivos. La clave está en encontrar el equilibrio entre la automatización y la intervención humana, aprovechando lo mejor de ambos mundos para construir un entorno profesional más inteligente y eficaz.