Diccionario de Marketing Digital

¿Qué es la tasa o porcentaje de rebote?

Escrito por David Tomas | 20 de diciembre de 2021 9:00:00 Z

Conocer la tasa o porcentaje de rebote es clave dentro de cualquier estrategia SEO, ya que es una métrica que puede dar pistas sobre si lo que hay en la web es lo que realmente quería encontrar el usuario o no, así como si la velocidad de carga es la óptima, si tiene un buen diseño... Pero ¿qué es exactamente el porcentaje de rebote y cómo afecta al tráfico web?

 

Tasa o porcentaje de rebote: qué significa

El porcentaje de rebote indica el número de usuarios que han abandonado la página web sin haber interactuado con ella. Dentro de este número se incluyen los usuarios que vuelven a la página anterior, los que deciden cerrar el navegador o pestaña y los que saltan a otra web. 

Este dato sirve para detectar si hay algo en la web que no funciona correctamente. Puede ser que el contenido que haya encontrado el usuario no sea interesante o no sea lo esperado, puede ser que la velocidad de carga sea muy baja o que haya un error en la página, incluso que el diseño no sea atractivo. 

Para poder encontrar el error o aquello que debe mejorarse se puede tener en cuenta el tiempo de permanencia de los usuarios en la web. Cuando este es alto, el rebote puede estar indicando que el contenido no es interesante o no ha resuelto sus dudas, mientras que si los usuarios apenas pasan unos segundos en la web puede que haya algún tipo de error en la navegación.

 

¿Cómo se calcula la tasa de rebote?

Para calcular la tasa de rebote basta con dividir el número de usuarios que han abandonado la página web sin haber interactuado con ella entre el número total que han entrado en ella:

Número de usuarios que abandonan la web/Número de usuarios totales = Tasa de rebote

Por ejemplo: si en una página web han entrado 100 usuarios y 20 abandonaron la página sin hacer ninguna acción, el porcentaje de rebote sería del 20%.

 

Consejos para reducir la tasa de rebote

Tener un elevado porcentaje de rebote puede perjudicar al posicionamiento SEO, ya que es algo que los buscadores como Google penalizan. Esto significa que es muy importante revisar de forma regular las analíticas para detectar si ese número crece, se mantiene o baja. Tanto en el primer como segundo caso sería interesante analizar qué tiene la página web que provoque ese abandono:

  • Contenido: además de dar información escrita que resulte interesante para el usuario y que esté bien redactada y con las palabras clave bien escogidas, también deben cuidarse aquellos detalles que acompañan al texto, como imágenes, gráficos y vídeos, entre otros.
  • Legibilidad: muchas veces menos es más. Los usuarios no quieren encontrarse con grandes bloques de texto, por lo que debe combinarse siempre con imágenes, vídeos u otros elementos que agilicen y amenicen la lectura. Separar el texto con títulos también puede ayudar. Eso sí, los elementos no deben ralentizar la carga de la página web.
  • Usabilidad: la navegación por la página web debe ser segura y cómoda. Es decir, estar muy bien estructurada, cargar rápido y que se adapte a cualquier tipo de dispositivo.

Además de todo esto, es importante asegurarse de que la página web no da un error 404 o cualquier otro tipo de problema, ya que esto también haría aumentar la tasa de rebote.