El futuro ya está entre nosotros. Vivimos en un mundo donde la tecnología avanza a ritmos increíbles, y el progreso no deja de acelerarse. Solo hace falta recordar que hace apenas 10 años los smartphones eran prácticamente desconocidos entre el público general, y hoy casi no podemos imaginar nuestra vida sin ellos.
Mi predicción es que la siguiente gran revolución tecnológica vendrá de la mano de los robots y la inteligencia artificial. ¿Quieres saber cuáles son los puestos de trabajo que están condenados a desaparecer más pronto que tarde? ¡No te pierdas este artículo!
Los drones ya están aquí. Estos vehículos aéreos no controlados están presentes en 90 países y cumplen muchas funciones relacionadas con la seguridad y el transporte. Y no faltan quienes creen que pronto podremos ver este tipo de avances en la aviación comercial, esto es, vuelos de pasajeros donde el piloto sea reemplazado por una inteligencia artificial.
De manera más inmediata, los coches autónomos ya están siendo seriamente investigados por compañías como Google y Tesla, que se han propuesto cambiar totalmente la manera en que nos desplazamos por las ciudades. Se calcula que para 2025 uno de cada diez coches será totalmente autónomo. Estos vehículos tendrán un importe superior al actual, pero tampoco tan exagerado: según los analistas de la consultora Merril Lynch, costarán en torno a 8500 euros y además se irán abaratando con el tiempo.
¿Dejarías que un robot te operase? Puede que en unos años no solo sea tu mejor opción, sino que consiga mejores resultados que cualquier cirujano humano. En el año 2000 hubo 1000 operaciones asistidas por robots, mientras que en 2014 ya eran 570.000.
Pero la cirugía no es la única aplicación de los robots en salud, ya que también son muy útiles para ayudar a los pacientes ancianos o con diversidad funcional a realizar sus tareas diarias. Japón, una nación de gran nivel tecnológico y con una población envejecida, ya está apostando por este tipo de soluciones. Y todo esto sin entrar en las posibilidades de la inteligencia artificial para ayudarnos a solucionar los problemas de salud más complejos.
Muchos son los que han intentado predecir los movimientos de la Bolsa, pero muy pocos se han hecho realmente ricos con ella. ¿Quizá ha llegado la hora de dejar que los robots hagan este trabajo por nosotros?
Ya se están diseñando algoritmos de inteligencia artificial que son capaces de aprender de los movimientos de mercados en todo el planeta con mucha más rapidez que un ser humano. En los próximos años, estos programas podrían sustituir a los inversores financieros a la hora de gestionar el dinero.
La inteligencia artificial y los robots también tienen mucho que decir a la hora de gestionar granjas y fábricas.
Para las primeras, se prevé que en 2025 ya estén usando soluciones basadas en el big data para optimizar sus cultivos. Además, los robots podrán hacerse cargo de las tareas físicas más pesadas y repetitivas.
Por otro lado, las fábricas son uno de los lugares más prometedores para los experimentos en automatización. A día de hoy, en torno al 10 % de las tareas de las fábricas se realizan sin ninguna intervención humana; según los expertos, dentro de 10 años ya serán el 35 %.
En el marketing digital, las nuevas tecnologías están llenas de perspectivas fascinantes. La inteligencia artificial y el big data ya están dando lugar a algoritmos que permiten hacer cosas impensables hace solo unos años:
En definitiva, las soluciones de inteligencia artificial aplicadas al marketing digital conseguirán reducir al mínimo el error humano, aumentar la precisión hasta extremos nunca vistos y automatizar muchísimas tareas. Pero no te preocupes por tu puesto de trabajo: los marketers seguiremos siendo imprescindibles para diseñar la estrategia y ocuparnos de las tareas más creativas.