El SEM es una estrategia que puede dar un montón de beneficios a tu marca... pero con Google AdWords, es difícil acertar a la primera. ¡No desesperes! Si tu campaña no está funcionando, échale un vistazo a estos fallos comunes.
Por ejemplo, vendes ropa deportiva y has invertido la mayor parte de tu presupuesto en términos como "pantalones de deporte" o incluso "pantalones de escalada" o quieres promocionar con tus campañas de marketing online en Navidad una marca de bolsos para jóvenes y pones "bolsos jóvenes Navidad" o "bolsos para adolescentes Nochebuena". ¡Error! Cuanto más precisos y descriptivos sean tus términos de búsqueda, menor será el riesgo de tu estrategia y mayores las posibilidades de conversión. Distínguete de la competencia y apuesta por palabras clave muy ajustadas y descriptivas, como "pantalones cortos de escalada para mujer" o "regalo + bolsos para chicas jóvenes en Navidad". Así, estarás dirigiendo a los usuarios justo al sitio que necesitan.
Muchas marcas, cuando se acercan por primera vez a Google AdWords, se limitan a comprar un montón de palabras clave relacionadas con su sector... y luego se sorprenden de la falta de resultados. ¡No seas una de ellas!
Antes de lanzarte a la piscina, necesitas hacer los deberes y dedicar tiempo a plantear tu campaña. Piensa en cómo es tu público ideal, cuáles son sus hábitos de búsqueda y cómo puedes resolver su problema.
Google AdWords es una de las soluciones de marketing más medibles... pero eso no quiere decir que vayas a alcanzar tus objetivos automáticamente. Necesitas ser conservador a la hora de estimar los costes por clic y el ratio de conversión, o te encontrarás con que la realidad no está a la altura de tus planes.
Por otro lado, la buena noticia es que muchas veces se pasan por alto algunos aspectos del ROI de AdWords. A la hora de calcular los resultados, debes tener en cuenta factores como las compras repetidas por parte del mismo cliente o el impacto de sus recomendaciones a conocidos.
Encontrar las palabras clave óptimas es solo la mitad del problema. Cuando hacen clic en un anuncio de Google AdWords, los usuarios llegarán a tu landing page, así que si no quieres que se vayan por donde han venido, más te vale que sea persuasiva. Prueba estos trucos:
El ratio medio de conversión en AdWords va del 0,05 al 5%. Eso significa que un montón de clics se pierden por el camino, pero puedes capturarlos gracias al retargeting.
En particular, si tienes un ecommerce, no te pierdas las posibilidades del retargeting dinámico para ofrecer anuncios personalizados para cada producto.
Google AdWords está lleno de trucos, herramientas y sorpresas. Es como ese mito que dice que solo usamos el 10% de nuestro cerebro: seguro que hay opciones que ni siquiera sabías que están ahí. ¿Cómo solucionarlo? Consulta a un experto en SEM para exprimir todo su potencial.